Transporte aéreo dominicano entre esperanzas e incertidumbres

20 Noviembre 2020   Piloto Aviador Elvio Carrasco

Transporte aéreo dominicano entre esperanzas e incertidumbres

Dentro de un proyecto de nacion de cualquier país del mundo estará siempre garantizar la movilidad y la conectividad. Ambos renglones son pilares fundamentales del desarrollo económico de cualquier sociedad moderna donde están definidas con anterioridad todas las prioridad.

 
Dentro de un plan estratégico de toda nacion en vía de desarrollo está el garantizar altos niveles de competitividad, pero en todos los renglones posibles y el transporte aéreo debe ser una prioridad de Estado si su principal industria es la turística y como isla dentro del marco de seguridad nacional. Nuestro país sentó las bases para erradicar una industria turística de calidad internacional, donde hoy en dia sigue siendo la principal destino de las Antillas, demostrando la vocacion de servicio de nuestro pueblo y compromiso de Estado en lograr esas conquistas económicas, siendo así evidente que es posible el concurso del sector público y privado a la hora de alcanzar objetivos de alto nivel estratégico. 
 
Entra en contradición, que, a pesar de tener un marco legal robusto, instituciones reguladoras con premios internacionales a la calidad y una infraestructura aeroportuaria modelo regional, aún como país no podemos decir nuestras líneas aéreas logran el nivel de competitividad deseado. Podriamos encontrar múltiples factores que irían, desde la falta de interés por los principales grupos económicos del país, la incapacidad del empresariado local y la ausencia del apoyo estatal.
 
Pero si vemos las concesiones aeroportuarias como es el caso de Aeropuertos Dominicanos Siglo XXI (Aerodom) y demás operadores de aeropuertos privados del país, desde un principio gozaron de exenciones fiscales y la debida representación ante el pleno de la Junta de Aviación Civil (JAC), privilegio que no tienen los operadores certificados en la República Dominicana.
 
Aún en el apogeo de la campaña electoral nunca fue un tema de agenda por nigún partidoo candidato las problematicas de la industria aérea nacional y lo peor es cuando vemos a 100 días del nuevo gobierno, el poco interés por parte de las autoridades en un acercamiento sincero con los operadores nacionales para buscar juntos las posibles soluciones a corto y mediano plazo, de los difrentes problemas que afectan a las lineas aéreas nacionales.
 
No nos queda muy claro si ya en República Dominicana se tienen definidos los pasos a seguir para garantizar un nivel de movilidad y conectividad regional, bajo  el criterio de que se debe ser suministrado por operadores nacionales y que lleven consigo la marca país que tanto anhelamos vender internacionalmente. Se tiene muchas esperanzas en que las cosas puedan cambiar para bien, pero las señales no son del todo claras, aún en este momento donde es posible lograr más con un menor esfuerzo, tomando en cuenta el aspecto impositivo (los impuestos y tasas) pendiente de pago y que pudieran ser la salvación de la industria nacional, si existe en el ánimo de las autoridades conceder las condiciones fiscales más flexibles al operador nacional y condenar la deuda por concepto de la tasas dada la cirsis económica actual, como reciben operadores internacionales por parte de sus Estados, igualando las oportunidades, elevando la competitividad y motivando la inversión privada en un área que sin duda es muy rentable.
 
Sabemos que las aerolíneas internacionales compiten entre ellas por el gran flujo de pasajeros que representan las diferentes rutas en la República Dominicana con una media anual sobre los 6,000,000 de pasajeros, donde el operador nacional solo logra transportar el 1.5%. Estos datos nos llenan de incertidumbres, dejan al desnudo la incapacidad de competir con grandes capitales, pero aun teniendo uno de los mayores flujos de pasajeros del Caribe no podemos conectar regionalmente ni siquiera los destinos donde las comunidades dominicanas hacen vida, con la cobertura de una linea aérea nacional.
 
Es momento de reflexión, haciendo necesario un cambio de direccion y aprovechar los planes de contigencia post Covid-19 en el relanzamiento económico de nuestro país, para incluir transporte aéreo (líneas aéreas nacionales) como una prioridad del Estado porque es necesario participación del poder legislativo. Todo lo que se les pueda exonerar por efecto de la crisis económica será bien visto y valorado por nuestra comunidad aeronáutica, vivimos un momento histórico que debe ser para ayudar y proteger lo que aún nos queda para exhibir con orgullo internacionalmente nuestras líneas aéreas junto a nuestra marca pais.
 
Levantemos el ánimo, debemos tener la esperanza puesta en que se sabrá valorar el esfuerzo realizado por nuestros empresarios dominicnaos y esas incertidumbres sabrán encontrar respuestas en mano de un nuevo liderazgo. Ojalá el cambio traiga un cambio y sea todo lo puesto a lo que ya sabemos daña el interés nacional, por el futuro de la República Domnicana y la aviación Nacional.
 
 
Coloaboración del Piloto Aviador Elvio Carrasco
Licenciado en drecho, piloto comercial, instructor y consultor técnico. Expresidente de la asociación de pilotos de la República Dominicana. Presidente Bennu Consulta y Gerencia EIRL